A pesar de ello, y a diferencia de lo que sucedería con el Athletic bilbaíno, el color azul seguiría estando vinculado al club madrileño, luciéndolo en sus pantalones de forma definitiva desde 1921 para diferenciarse del conjunto vasco. Fue un espejismo, ya que a partir de aquí el equipo dirigido bajo la batuta de Theo Vonk, comenzó a encadenar una serie de resultados que acabaron con el equipo en las últimas posiciones de las cuales no pudo salir, camiseta del real madrid a pesar del baile de entrenadores que sufrió el club hasta el final de temporada.