Al año siguiente a su quinto título continental, el que con el paso de los años se convirtió en su mayor rival, el C. F. Barcelona, fue el causante su primera eliminación europea. El equipo se consolidó en Segunda y comenzó a pensarse en volver a Primera. Los viejos ídolos del club dieron paso a un equipo de jóvenes españoles como Enrique Pérez Pachín, Pedro de Felipe, Manuel Sanchís, José Martínez Pirri, Ignacio Zoco, Paco Serena, Amancio Amaro, Ramón Grosso o Manuel Velázquez; todos ellos capitaneados por el veterano Paco Gento.